Hoy vi un reflejo, un espejo tan distinto y tan igual a mi.
Apenas cruzo la calle y el cielo se abrió de nubes.
Sus ojos, mis ojos son agua dulce de miel y barro. Tan tibios como dormir y morir al rozar los astros.
Hay algo mío dentro de ella y algo de ella dentro de mi.
Justo cuando pensaba que vivir ya me sonaba raro.
No puedo dejar de sentir y pensar es tan complicado. No hay pecado peor que negar al amor cuando uno ya lo ha encontrado.
Siento como caigo en un abismo de algodón.
No hay cura mejor para el dolor que volar entre sus brazos. E.
Sin pensarlo.
Todo coincide, algo raro vive dentro de mi.
No termine de morir y en un segundo había resucitado.
Un miedo hermoso me tiene flotando sin saber donde ir y escucho a mi corazón gritando por cuidar sus pasos.
Químicas a químicas extrañas pieles sin mañas, mañanas eternas que ya agradecen volver a sentir. No se que será de ti tampoco que será de mi, la verdad es una risa difícil de ser borrada.
Siento como caigo en un abismo de algodón.
No hay cura mejor para el dolor que volar entre sus brazos. E.
Sin pensarlo.
Siento como caigo en un abismo de algodón.
No hay cura mejor para el dolor que volar entre sus brazos. E.
Sin pensarlo.
Sin pensarlo, sin pensarlo, sin pensarlo.